Más allá del trámite de dar de comer en cualquier lugar

La empresa, con más de cuarenta años en el sector del cátering, asegura ser capaz de antender a 7.000 personas en un día

Alfonso Rodríguez es hoy en Andalucía sinónimo de Cátering, tras cuarenta años de trabajo en una especialidad en la que fue pionero a finales de los sesenta. Hoy la empresa es líder en su sector y está en manos de sus tres hijos, Sara (marketing), Alfonso (director gerente) y César (jefe de cocina). Alfonso padre tuvo el primer contacto con la hostelería de muy joven en la Venta Cuatro Caminos de Jerez de sus padres.

Desde allí marchó a buscar nuevas experiencias en Baleares, donde terminó trabajando en el servicio de cátering del aeropuerto de Palma. A finales de los sesenta regresó a la Venta familiar trayendo en su cabeza los mimbres de aquel tipo de servicio tan novedoso en aquellos años.

Al poco tiempo un bodeguero buen cliente de la venta le propuso servir una comida en la misma bodega y Alfonso aceptó el reto. «Le pinté la palabra cátering al isocarro que mi padre tenía en la venta», recuerda, «cargué todo lo necesario, dimos la comida y el cliente quedó satisfecho».

A partir de esa primera comida los retos fueron creciendo, la buena situación del sector bodeguero jerezano del momento, la gran cantidad de espacios donde dar banquetes como los los palacetes de la ciudad, hacían de la comarca de Jerez un campo abonado donde esta nueva actividad fue creciendo. Alfonso contó desde el principio con el trabajo el apoyo de su hermano Antonio y juntos fundaron la nueva empresa de cátering.

El concepto de servicio desarrollado por esta empresa ha ido más allá del mero trámite de dar de comer en cualquier lugar. Desde los inicios, Alfonso se ha preocupado de todo lo que rodea y engrandece a un banquete, como son decorados, mesas, luces, menaje y un largo listado de detalles que buscan un sólo objetivo: «Que el cliente esté lo mas confortable posible en cualquier sitio donde se le ocurra dar una comida».

Con esta filosofía ha ofrecido banquetes en toda la geografía española, en gran parte de Europa central, en los Estados Unidos y en el Caribe. Uno de los momentos más especiales fueron las comidas de inauguración y clausura de la Expo 92 de Sevilla, así como los banquetes oficiales para los jefes de estado que visitaron la muestra.

La versatilidad alcanzada por Alfonso Cátering, les ha llevado a aceptar retos como el servicio de comida de 200 personas durante semanas en las pruebas de mar de los superpetroleros que los astilleros de la Bahía construían en el pasado, al mismo tiempo se han dado banquetes para mil invitados de Telefónica en pleno desierto del Sahara, en las proximidades de la ciudad marroquí de Ouarzazate. «Era un espectáculo ver desfilar todo el convoy de camiones con el logo de Alfonso por las carreteras del Atlas» recuerda Sara. «…Y todo eso sin dejar de atender en numerosas ocasiones los encargos de la Familia Real» añade Óscar.

En la actualidad la empresa tiene una logística capaz de atender a 7.000 personas en un día, en 24 lugares diferentes y a la misma hora. «Hoy esta capacidad de respuesta sólo la podemos ofrecer nosotros en Andalucía», afirma Alfonso hijo.

«Cuando le decimos sí a un cliente, éste tiene la absoluta garantía de que su banquete se va a celebrar sin problema» asegura Cesar, recordando como en un evento que se tenía que celebrar en el Pabellón de la Navegación de Sevilla, los camiones ardieron con la comida, el menaje y todo lo necesario para el acontecimiento a pocas horas del inicio. La capacidad de respuesta de la empresa y de sus trabajadores fue tal, que en sólo dos horas todo estaba solucionado, la comida se celebró con normalidad. «Lo más importante fue que el cliente no se enteró de nada y no sufrió el estrés que sufrimos nosotros», concluye Alfonso.

Futuro

Los últimos diez años han tenido una especial importancia en la vida de esta empresa familiar. Se han construido las nuevas instalaciones centrales en Jerez siguiendo   la   normativa han ido asumiendo distintas responsabilidades en la firma.

Hoy el cambio generacional ya está consumado y el objetivo inmediato está en crecer con sedes logísticas en todas las provincias andaluzas, «pero manteniendo la central en Jerez por devoción» apostilla el patriarca.

Para todos existe una preocupación común: «los piratas del cátering y competencia desleal». «Nosotros contamos con todos los registros sanitarios y administrativos necesarios, comenta Alfonso hijo, «y recibimos continuas inspecciones que pasamos con normalidad. Pero cada vez es mayor la presencia de ilegales que dan este tipo de servicio sin ofrecer garantía».